sábado, 30 de enero de 2010

Capítulo 16: Aprendiendo a reducir el consumo

En este último repostaje me he propuesto bajar defintivamente el consumo de litros a los 100 kilómetros.

Me estoy acostumbrando a conducir con la información permamente en el visor del ordenador de a bordo del consumo on-line de gasoil. Claramente veía cómo aumenta el consumo hasta 15 litros cada vez que piso el acelerador en marchas cortas y lo pongo casi a 3.000 rpm.

Fijándome un poco, se ve que cuando se arranca el coche, o se circula en ciudad a baja velocidad, pero con el motor revolucionado, es cuando el consumo se dispara. Lo que sucede es que, por ejemplo, al arrancar, estamos muy poco tiempo en esta situación, pero el consumo medio se va a hacer puñetas.


Asi que, durante la última semana de enero del 2010 empecé a concudir de una forma maricona. Arrancaba todas las mañanas muy lentamente, sin revolucionar apenas el coche, y en la nacional procuraba no sobrepasar las 2.100 rpm en quinta, con lo que iba entre 90 y 100 kms/hora duranta el trayecto que iba de casa al trabajo, y del trabajo a casa.


En fin, poco a poco la media fue descendiendo, décima a décima, hasta llegar a los 5'9 litros a los 100 kms. Ya veremos en los proximos repostajes.

viernes, 15 de enero de 2010

capítulo 15: El litro de gasoil supera el euro

Hoy he repostado de nuevo. Ya lo habían dicho en las noticias de los telediarios: el gasoil ha subido hasta precios del 2008, y el litro cuesta algo más de un euro. En este caso, lo he pagado a 1,017 euros el litro.

Algo que ya se veía venir.

En esta crisis que nos está tocando vivir, con tanto paro, tantas deudas hipotecarias, tanta morosidad, con tan poco dinero moviéndose, el que existiera un euribor por los suelos y el precio del petroleo bastante bajo por la poca demanda en el mercado, era un pequeño alivio para el bolsillo de cada hogar.

Viendo que los países europeos más potentes están despuntando muy ligeramente de la crisis, y que poco a poco remontarán el vuelo, hace que en los demás países donde la crisis está más arraigada el euribor también suba, y que poco a poco remonte la economía pero a costa del esfuerzo de cada familia.

El problema de España vendrá cuando la demanda de petróleo del resto de Europa se incremente, lo que hará que el precio del petróleo suba y suba de forma escalonada. Desgraciadamente, esto va a repercutir globalmente, puesto que aun estamos en crisis con un altisimo porcentaje de paro en nuestro país. Esta subida del litro del gasoil volverá a agudizar los problemas al encarecer cualquier actividad que requiera gasolina (campo, pesca, transporte ..) y por tanto disminuyendo los beneficios. Volverán de nuevo las huegas, los pactos y los convenios para la aplicación de subvenciones que palíen las pérdidas, lo que hará que las arcas del país se queden aún más vacías, y que, por ejemplo, los precios de la comida suban de nuevo.

En el momento en que el dolar, moneda con que se paga el petróleo, se revalorice frente al euro, se incrementará el coste del barril del petróleo. En fin, que el nivel medio de vida español volverá a bajar, y la vida estará aún más encarecida.

Un gran parte de estos problemas vienen por el elevadísimo porcentaje de personas que tenían trabajo en la construccion. Al quedarse el currito sin trabajo al bajar bruscamente la venta inmobiliaria debido al exagerado precio que había alcanzado el metro cuadrado de vivienda gracias a la avaricia de las constructoras y el afan recaudatorio de los ayuntamientos al incrementar el precio del metro cuadrado, hace que todas las empresas vinculadas a la construccion se colapsen, no puedan ofertar trabajo a sus empleados, no vendan nada de lo construido y no puedan afrontar sus deudas al no haber dinero circulante y porque los bancos no dan más creditos.

Los bancos no pueden dar prestamos a nadie, ni empresas ni particulares, porque ahora están viendo que no pueden cobrar los prestamos que anteriormente ofertaron porque la gente está en paro, porque los tipos de interés de los prestamos hipotecarios los dieron casi a precio de usura, y el coste real actual de la vivienda es inferior al precio de la hipoteca que dieron al cliente para comprar su casa. El precio de las viviendas era desproporcionalmente alto frente a lo que eran los salarios medios de la familia española. Los que se casaban y querían tener vivienda propia, tenían que hipotecarse 40 años para poder afrontar la mensualidad del recibo del prestamo, y que en muchos casos superaba el 70% de los ingresos familiares. El precio de los alquieres estaba por las nubes, siendo equiparable al costo del recibo mensual del un prestamo. En España, el vivir de alquiler es considerado algo así como tirar dinero a un pozo, porque tener una vivienda en propiedad es signo de prosperidad y de tener algun bien en el momento de la jubilacion y de la herencia a los hijos. La politica del gobierno frente al alquiler de viviendas siempre ha sido un desastre.

En fin, así estamos, media España trabajando y cotizando para que el otro resto pueda malvivir con un subsidio, una pension o una ayuda.

Una parte del problema es la dependencia del petróleo, cuyo precio repercute a todos los niveles. Habría que generar trabajo y empresas en la rama de las energías renovables, investigar en motores y fuentes de energías independientes del petróleo, (eolica, solar, nuclear...) pero de un modo sostenible. Aun me estremezco pensando en el biodiesel obtenido de los cereales, que hizo que disminuyera alarmantemente la parte dedicada a la alimentación, y se encareciera el precio del trigo y de los alimentos, porque en vez de dedicarse a comida, se dedicó a biogasoil. Peor el remedio que la enfermedad, como consecuencia de la especulacion de precios en el mercado energetico. La madre que les parió.

A lo que ibamos, que el precio del litro del gasoil será cada vez más alto en cada repostaje. Y lo podremos ver en un futuro muy próximo.

lunes, 11 de enero de 2010

capitulo 14: de nuevo, hielo y nieve

Toda España está nevada. Después de la lluvia que nos ha acompañado durante estas navidades, toca de nuevo el frío.

Estaba esperando la situación de las carreteras al iniciarse el lunes, ya que el domingo por la tarde ya empezaba a nevar copiosamente, y amenazaba la formación de placas de hielo. La temperatura rondaba entre los -5 y -7 grados centígrados.

Salí de casa a las siete de la mañana, para dirigirme al trabajo. Las calles alrededor de mi casa estaban congeladas, y había que circular con muchísima precaución. El tráfico era escaso, y la carretera no estaba muy rodada. Pero una vez alcanzada la A2, el tráfico era muy fluído, las quitanieves y la sal habían echo su trabajo.
No se me olvidó desactivar el ESP, que no es recomendable en hielo. Los chivatos son los siguientes.

 

Una vez llegado al trabajo, aparqué el coche entre la nieve.

Al terminar la jornada, la nieve era casi testimonial, la temperatura había subido a los 8 grados. Sin embargo, el asfalto estaba completamente salado, el agua con la sal esparcida para evitar placas de hielo salpicaba a todos los coches. El resultado fue que toda la carrocería se ensució con una especie de capa blanquecina.
Los cristales se ensuciaban continuamente por el agua salpicada en el rodaje de los otros coches.
Eso hacía que los limpias funcionaran continuamente ... hasta que se acabó el líquido limpiador. La goma del limpia no sólo no quitaba la sal del cristal, sino que la distribuía homogéneamente en su superficie, haciendo que las lunetas se quedaran traslúcidas.  Tuve que poner todo mi cuidado y atención para terminar los últimos kilómetros del recorrido. Inmediatamente compré un par de botes de liquido limpiador.

 
Dudé en comprar un bote grande de anticongelante, y echarlo mezclado con agua. Me salía casi a mitad de precio, pero al final compré dos botes de litro de liquido limpiaparabrisas de aguante hasta -9 grados centígrados, a 1.90 euros el bote. Un robo.
 
 
Al final, como la capacidad del depósito era de tres litros, lo rellené con agua.

El hombre del tiempo dice que mañana va a llover. A ver si es verdad.